¡Permiso! ¡Buenos días, buenas tardes o noches, queridos chicos y queridas chicas! ¡Hola, chicos y chicas! ¿Cómo están? Queremos compartir junto con todos ustedes, una dedicatoria especial.
Queremos compartir y presentarles desde la Ciudad de Córdoba Capital, Argentina, junto con toda mi familia, con todos mis seres queridos y amigos, tanto para cada uno de ustedes, como así también; para cada una de sus familias, para cada uno de sus seres queridos y amigos, esta bonita oración de sanación. Por favor procuren no romperla. Escogí bien a mis doce personas queridas, envíala por favor, a quien tú creas que la necesite:
Padre nuestro camina dentro de mi casa.
Y llévate todas mis preocupaciones, enfermedades, temores;
Y por favor protege a mis padres, hermanos, a mis hijos, amigos y toda mi familia, en el nombre de Jesús.
Amén.
¡Gracias, muchas gracias por su apoyo, queridos amigos!
¡Lo apreciamos mucho, queridos amigos!
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